¿Cuántos sombreros diferentes puedes usar en un solo día?

El otro día estuve reflexionando porque una amiga me preguntó si quería participar en una entrevista para un programa de radio, y me quedé pensando que nunca en la vida me hubiera imaginado participar en una entrevista, y mucho menos hablar sobre salud mental en otro país y en inglés. Fue una entrevista muy corta, solo 15 minutos, pero esos 15 minutos fueron suficientes para confirmar una vez más que tomar la decisión de dejar todo atrás en mi país y salir de mi zona de confort fue lo correcto.

A raíz de eso, empecé a pensar en los diferentes roles que desempeño a diario, roles en los que normalmente no pienso, pero que definitivamente cambio según lo que tenga planeado para el día o las actividades que tenga programadas. Sin duda, el sombrero más importante en este momento es el de esposa. Suena terrible, ¡hasta me da un poco de vergüenza decirlo! Pero en los últimos dos años, mi vida ha sido completamente sobre Adrián, y eso me ha enseñado a invertir en nuestra relación y a mantenerla sólida para que podamos superar los desafíos de vivir lejos.

La migración también me ha hecho trabajar mucho en mi papel de amiga. Quienes me conocen de antes saben que nunca fui muy sociable en Costa Rica. Siendo honesta, solía cancelar planes a último momento y no priorizaba a mis amigos. Pero la migración me ha enseñado que mis amigos aquí son mi familia y mi sistema de apoyo. La verdad es que amo con todo mi corazón a mis amigos aquí. Me dan vida y me ayudan a no sentirme tan sola.

Otro papel que he aprendido a desempeñar y que adoro es el de coach. Descubrí este papel cuando mi trabajo publicó un artículo dándome la bienvenida al grupo de coaches, y la verdad es que me llenó de orgullo. Ayudar a otras personas es definitivamente mi pasión. Ser capaz de contribuir, aunque sea un 20%, a que estas personas consigan un trabajo significativo me llena de orgullo y gratitud por los dones que he descubierto.

¿Qué otros sombreros asumimos a lo largo del día? También llevo puestos mis sombreros de trabajo (¡a veces más de uno, jaja!), de madre de dos hermosas criaturas perrunas, de ama de casa, de deportista, de hija, de hermana, de nieta y de muchas otras cosas más. Es interesante ver cómo podemos adaptarnos y ser diferentes personas según la situación. Cada uno de nosotros tiene una serie de responsabilidades y tareas que cambian constantemente, como si tuviéramos varios sombreros que ponernos en diferentes momentos. Es un recordatorio de nuestra habilidad para ser flexibles y afrontar lo que la vida nos presenta con diferentes habilidades y enfoques.

PD: Como es costumbre, les comparto esta es una foto linda del fin de semana en el que fuimos a comprar flores y estrené mi bolso de Hedwig (if you know, you know)